miércoles, 12 de marzo de 2014

Los dos sueldos

D ecía ayer que, cuando los dos cónyuges optan por trabajar, muchas veces por necesidad, otras (por simplificar) por ser lo 'políticamente correcto' se crea, en mi opinión, una disfunción importante, referente al cuidado del núcleo familiar. Y que, sin embargo, en la Madre Naturaleza, tienden a existir dos roles, el de 'cazador' y el de 'cuidador'. A veces expresos, otros alternantes. Pero el caso es que siempre hay alguien 'protegiendo el hogar', 'cuidando a la prole', 'transmitiendo la herencia del conocimiento', etc.

La mujer se ha venido ocupando, tradicionalmente, de ello. Es lo que se llamaba ser 'ama de casa', tener 'de profesión sus labores', etc. Los vascos lo elevan de categoría: practican el matriarcado y a sus mujeres siempre les llamaron 'etxekoandres' o sea, 'señoras de la casa'.

Dejando a un lado (y con todo respeto) a las políticas de liberación de la mujer, y a ese largo etc de reivindicaciones, aceptando, incluso, como algo natural, que pueda haber una 'polivalencia' del género, vamos a quedarnos con la idea de que ese, el de ser ama (o amo) de casa, o etxekoandre,  es un trabajo 'fundamental'

Que no está, en absoluto, ni valorado ni, mucho menos, retribuido.

Y la verdad es que si lo estuvo: hace muchos años existían los 'puntos', que era un sobresueldo que entonces percibían los cabeza de familia por tener a su cargo un cónyuge, hijos, etc. Luego desapareció, y digamos que quedó el sueldo 'pelao', igual para un padre de familia numerosa que para un solterón que viviese con sus padres. Y llegó el consumismo, la letra del coche, la hipoteca... y los hogares empezaron a necesitar un segundo sueldo para sobrevivir. Y a considerarlo como 'lo normal'.

Así, hoy en día, las familias españolas se agrupan en tres tipologías: las que 'solo trabaja uno', pero con un sueldazo (variante: trabajan los dos... y con un sueldazo cada uno. Pero esto solo existe en la clase política), las que 'trabajan los dos', con dos suelditos y 'las que solo trabaja uno, y con un sueldito'. Este último grupo, en el que por cierto me encuentro, podríamos decir que es una especie a extinguir, por lo civil... o por lo militar (a gorrazos, vamos...).

Y yo me pregunto... ¿por qué el Estado no paga un sueldo al ama/amo de casa? Es decir, a la profesión 'sus labores', que es básica para el más armonioso desarrollo de la Sociedad. Por supuesto, incompatible con que esa persona cobre otro sueldo o subvención... y, también por supuesto, cubriendo sus eventuales necesidades de prestaciones por desempleo (por separación, con hijos), viudedad, etc.

¿Utopía...?

Bueno, pues habría que hacer números porque... ¿cuanta gente dejaría de ser demandante activo de empleo, si ya tiene ese, y es remunerado? ¿y perceptores de subsidios de desempleo? ¿Y de los PER, y compañía? ¿Cuantos puestos de trabajo podrían, de esta forma, ser cubiertos por personas mas necesitadas? Y, sobre todo... ¿Cuanto dinero se podría derivar de otros muchos capítulos, mucho menos importantes, de los Presupuestos Generales de Estado?

Pero no caerá esa breva...

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