Chocolate para loros

Siempre he dicho que, en una economía doméstica ‘normalita’, a lo mejor un gasto superfluo de, digamos, 300 euros al mes, podría pasar desapercibido o, al menos, asumido. Y si saltásemos a la economía de un negocio familiar con una facturación anual de, digamos, unos 200.000 euros… a lo mejor ese despilfarro ‘tonto’ podría elevarse a unos 2 o 3.000 euros al año... sin que 'crujan' los cimientos.
Y si hablamos de una empresa que facture 2 millones de euros al año… es posible que nadie se lleve las manos a la cabeza si resulta que, al cabo de ese año, se han malgastado 10.000 euros. No llega ni al 1%...

Seguimos con la hipótesis: Para una empresa que facture 2.000 millones al año, es posible que pasen totalmente desapercibidos unos gastos ‘poco productivos’ por valor de… ¿10 millones de euros?. Y si se facturaran 20.000 millones… ¿a alguien le va a preocupar una suma de malas decisiones que supongan un coste de… ¿100 millones? Total, solo es el 0,5% de la facturación…

Pero la mayor empresa es el Estado. Y si el Estado ‘factura’ (mejor... gasta) 500.000 millones de euros al año (no tengo ni idea, aunque supongo que los gastos serán de ese orden, el 40-50% del PIB), está claro que un despilfarro del 1% es ‘chocolate del loro’… a pesar de que estamos hablando de 5.000 millones de euros que se irían por el sumidero… y eso son ‘muchas tabletas de chocolate’, cuando la gente de a pie sería feliz si les tocase, en la Bonoloto, unos ‘miseros' 0,5 millones de euros… ya que podrían permitir a una familia vivir razonablemente bien durante unos 20-25 años.

Un ciudadano español se ha dedicado a recopilar, en su Twiter, las subvenciones que reparte el Estado español.  Aquí: https://storify.com/Absolutexe/subvencionando

Y la cosa tiene bemoles: hay cosas tan absurdas como que se subvenciona la ‘creación de snacks de nueva generación a partir de algas y garrofín’ (y con 240.000 euros), o para 'estudios sobre el lenguado senegalés', hay dotaciones para un estudio sobre la 'Salud y el Bienestar de las Conejas Reproductoras', o para un 'Encuentro Internacional sobre Cucurbitáceas', etc, etc. Los ministerios de Exteriores, y el de Empleo y Seguridad Social, y los Partidos y Sindicatos se llevan la palma.

Así, por ejemplo, se aprueba un gasto de cerca de 160 millones de euros para ‘Inclusión social’: Aquí
Hala, y otros 100 millones, o más, para que las empresas mejoren su internet: aquí, aquí, aquí, aquí, aquí… ¿Pero qué pasa, que las empresas solo invierten para mejorar su rentabilidad si es ‘by to face’?
Y, por si acaso, otros 1.447 millones (¡los he sumado!), en un plan trianual, o sea cerca de 500 milloncejos de euracos al año, para proyectos empresariales (de los cuales esperan obtener beneficios... que no repartirán, claro) aquí.

Y, hablando del ‘by to face’, qué decir de los partidos políticos y los sindicatos que, aparte de estar pagados desde los Presupuestos Generales del Estado, van recibiendo otras bicocas ‘para gastos varios’ a lo largo del año, que por tanto no los soportan sus respectivos afiliados, sino todos los ciudadanos. Por ejemplo, 15 milloncitos para abrir boca, el primer trimestre: aquí
Y 100.000 euracos para fomentar la participación de los sindicatos en la negociación colectiva (solo) ‘en centros docentes no universitarios’, aquí
Que no se me olvide: por supuesto, también hay para la farándula, claro. Por poner un ejemplo, aquí

Bueno, para qué seguir, a lo largo del año se reparten miles de subvenciones… que son muchas tabletas de chocolate, caramba.

Y a dios gracias que ya no estamos en tiempos de ZP y sus ministras, donde, además de los apoyos gratuitos a todo lo que oliese a ‘izquierdas’, ‘feminismo’, 'populismo' o simplemente 'amiguismo', se forraban colectivos como uno muy famoso que se llamaba ‘las Walkirias’, o los Observatorios de Género (en Camboya, en el Magreb…), las Caravanas multiculturales… y hasta, por ejemplo, se regalaban 200.000 euracos para el proyecto de ‘Fortalecimiento de la adaptación al cambio climático de agricultores minifundistas en riesgo en el Valle del Jordán’ y cosas similares, como las ayudas a la ‘Asociación Extremeña para la Cooperación con la Región Amazónica’, a la 'Caravana de cine árabe-Iberoamericano realizado por mujeres’, etc, etc.

Que si, que chocolate del loro… pero presupuestar ajustando, simplemente, las partidas que, históricamente, van arrastrando los Presupuestos, en vez de hacerlo, alguna vez, ‘en Base Cero’ (o sea, justificando antes 'el qué', el 'para qué', y el 'cuánto') ayuda muy escasamente, o nada, a poner un poco de orden y a aprovechar mejor los recursos del Estado. Por ejemplo para no estar asustando a los futuros jubiletas de que se agotará, en unos años, el Fondo de Pensiones.

Y a la ejemplaridad en la administración de los impuestos recaudados. O, simplemente, a concienciarnos de que no es normal que en este puñetero pais se tenga que subvencionar el chocolate a tantos loros...